Estaba yo toda feliz caminando por los pasillos, aprovisionándome de los víveres básicos para subsistir (la cosa no está como para hacer demasiados excesos), y pensando en que tengo que contestar a un mail que tengo pendiente (y sigue pendiente), cuando lo he visto.
Ha sido como una aparición..., un montón de cajas excelentemente colocadas y repletas de polvorones y mantecados.
¡Horror! Ya está aquí otra vez. ¡Pero si es 3 de Noviembre! Cada año lo mismo, no sé por qué me sorprendo, cada año hago la misma afirmación, cada año la misma exclamación, cada año la misma interrogación. ¿Yaaaaaaaaaaa? ¡Joder! Ya estamos en Navidad (no oficialmente, pero ya comienza la fiebre consumista), ¡cómo pasa el tiempo!
Pero es la misma exclamación que hago cuando llega el verano, o la semana santa, o el otoño, o mi cumpleaños, o alguna fecha señalada. ¡Cómo pasa el tiempo!
El caso es que el tiempo pasa como tiene que pasar, sólo una vez cada 4 años el calendario nos regala un día más, pero el resto son igualitos..., con sus 365 días de 24 horas cada uno..., con sus 60 minutos por hora y sus 60 segundos por minuto...., pero ¡cómo pasa el tiempo!
Cuando me doy cuenta de estas cosas, es cuando hago balance. No lo hago en nochevieja, como las radios y televisiones con sus resúmenes, sino cuando algo me sorprende, como hoy. Así, que mientras miro el estante de los turrones, pienso en este último año, un año raro, el año en que cumplí 365 días sin fumar, el año en que volví a fumar, el año en que me olvidé de muchas cosas, y me acordé de muchas otras.
Un año de decisiones, de muchas cosas de las que arrepentirse, aunque no lo haga, porque no vale la pena arrepentirse de lo que se hace desde la sinrazón. Un año de viajes, de trabajo, de paro y de trabajo. Un año de soledad, un año de mucho dolor salpicado con grandes alegrías. Un año raro.
Ahora, hecho ya el balance del año, me queda mirar al futuro, o mejor, al presente, de mirar las cosas desde el prisma que a mí me de la gana. De coger cinco iniciales N T V A T, y componer la frase que a mi me guste:
"Nunca temas..., vive Ana. Todo"
12 comentarios:
Pues ánimo, porque a tiempos malos simpre le siguen buenos momentos.
Y respecto a arrepentirse... ¿de que sirve llorar sobre la leche derramada? Si cuando uno toma la decisión cree que es la correcta, no nos queda sino apechugar.
En el fondo yo pienso que lo bueno que tiene la vida y sobre todo lo bueno que tenemos nosotras, las mujeres excepcionales es que somos capaces de caernos, levantarnos, sacurdir las heridas y volver a caminar.
Tu lo has dicho. Vive.
A mi me pasa pero en Mayo...cuando le envío a mi contador mis papeles arrugados y mis borrones de balances... como me quiere mucho, me aguanta... y cada año le prometo lo mismo: "Este año te juro que sí lo llevaré todo en orden"...
XD
Mi año también ha sido raro. Y también he dejado el tabaco y he vuelto a fumar.
Me uno al último párrafo de María de Mave, totalmente de acuerdo. Y añado que además tenemos las narices de levantarnos con elegancia y, en muchos casos, sin molestar a nadie. Sacudiéndonos el polvo mientras caminamos de puntillas. Y ahí estamos. Siempre.
Un beso a tod@s
El tiempo pasa y pasa cada vez más deprisa. Siempre me lo habían dicho, a vosotras no? Y es jodidamente cierto. Acumulas segundos, minutos, horas, días, semanas y meses sin darte cuenta y cuando algo te hace recapacitar es cuando dices "otra vez!"
Los años pares en general no son buenos para mí. Éste ha sido (y será) especialmente malo por todo el marrón laboral q tengo encima, pero ya vendrán tiempos mejores. Seguro.
Os deseo a todas un Feliz año nuevo :)
El siguiente seguro que es mejor.
Besossssss
Juro sobre la tierra roja de Tara que no tocaré ni un polvorón, ni un mantecado, ni un trocito de turrón (ni siquiera del de chocolate de ya sabéis qué marca) hasta el mismísimo día 24 de diciembre...!! Ni que el Alcampo me ponga los los mostradores en la cola de la caja....!! Brrrrr... Amosanda, que toda la vida a dieta para que ahora me vengan estos con zarandajas...
jajajaja, el 23 por la noche te lo pregunto. Yo ayer resistí..., de mañana no quiero hablar
Cabrones..., después pondrán en primera línea los productos adelgazantes.
Besos guapa!
Viva el dulce manque engorde!!!
Jajajaja.
Los años son buenos y malos, tontos y sabios, olvidadizos y recordables.
Con el tiempo los años solo se quedan en eso... años. Suerte que los recuerdos buenos suelen ser los que más se quedan.
Siempre es mejor el siguiente.
Yo tambien he tropezado este año, y me he levantado a pies juntillas... pero no me arrepiento, ni de eso ni de nada más, es lo que tiene vivirlo todo. ;)
Besos de Navidad horribilis.
Pasa muy rápido, y cuantos más años cumples más rápido, es una realidad (te lo juro...). Haz hecho balance de un año, en el que has tenido de todo, bueno y malo, como todos, los días son iguales para todos, no te creas que para los demás son tan distintos.
A mi los polvorones no me gustan especialmente, nada de lo dulce engeneral, prefiero un buen bocadillo de tortilla ummmmmmmm.
Pienso que los años se quedan en vivencias, experiencias, aprendizajes, marquitas en el corazón, creo que son algo más que sólo años....
"Vive la vida.....la la la la la"
Un abrazote lleno de buenos deseos
Eso, a vivir y a vivirlo todo, ya vendrán años mejores y de arrepentirse nunca, pero nunca. De los años raros o malos o como quieras llamarlos también se pueden sacar cosas muy positivas y a la larga es eso lo que vale.
A vivir, que el tiempo pasa muy deprisa y encima los comercios se empeñan en adelantar acontecimientos (ayer me comí un trocito de turrón de chocolate...qué buenooooo....)
Besitos golosos.
Al..., a mí me duran los recuerdos malos, minuto y medio, de vez en cuando vuelven, y me duran otro minuto y medio, el tiempo que tardo en escribir un post, o un mail, o en una hoja de papel en el curro, el caso es escribir algo.
Lola..., si conocieras mi tortilla..., soy maestra tortillera! :P
Marrrrrrrrrrr, qué bueno verte por aquí. Un besazoooooooooooo.
No me gusta nada la navidad y es una mezcla entre tristeza y mala leche lo que siento cuando voy al super o a cualquier tienda y veo ya cosas de navidad... qué horror!
Mi año empieza en septiembre :)Feliz año nuevo para ti!
un besote
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