martes, 31 de julio de 2007

2 de Agosto de 2003

2 de Agosto de 2003, 3:30 de la madrugada.

Ana (agarrada a los barrotes de la cama): ¡Joder! ¡Joder! ¡Que me duele muchísimo! ¡Ayyyyyy!
Raul: Ya voy a llamar a la matrona.
Ana: ¡Joder! Que me va a mandar a la mierda, ¡joder!, que hace 1 hora no había borrado todavía.
Enfermera: ¡Que la llamo niña! ¡Qué te duele mucho!
Matrona: ¡Pero si sólo tienes 1 cm! ¡Anda que te paso al monitor pero no debería!

3:45 de la madrugada.

Doctora: ¿Cómo que un centímetro? ¡Pero si está de 3! Hacedle el prepad. No te preocupes que ya viene el anestesista.
Ana: ¡¡¡Dame algooooooo!!!! ¡¡¡¡Qué me duele muchooooooooo!!!!

4:00 de la madrugada.

Ana: ¡Me meo!
Matrona: ¡Corre, que ya está aquí el anestesista!
Ana: ¡Que no me meo! ¡Que tengo ganas de empujar!
Matrona: !No empujesssss! A ver de cuanto estás. ¡Joder! ¡Si estás de 8! ¡Al paritorio!
Ana (mirando al anestesista): ¡Dame algoooooooo! ¡Por favor!
Anestesista: Ya no da tiempo, no pasa nada.
Doctora: ¡Qué hace esta chica en el paritorio! A ver, ¡Coño! ¡Si está de 10! ¡A roto aguas! ¡Empuja! - al anestesista- ¡Ponle oxígeno! ¡Empuja! ¡Se ha precipitado! ¡Se ha precipitado! ¡Empuja! ¡Venga, venga, venga, muy bien Ana, muy bien! ¡¡¡Llamad al maridooooooo!!!
Ana: ¡¡¡¡¡Ayyyyyyyyyyyy!!!!!

4:15 de la madrugada

David: ¡¡¡Buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!
Doctora: Es un varoncín.
Raul: Ya está, está bien.
Ana: Ya no me duele nada.


2 de Agosto de 2007


4 añitos. Felicidades mi príncipe. Te quiero.

domingo, 29 de julio de 2007

La llamada

El sonido del teléfono resonaba en su cabeza como una taladradora. Rebeca se revolvía en su cama intentando dormirse de nuevo, pero no lo conseguía, su cabeza no paraba de darle vueltas a los acontecimientos del día anterior, cuando todo su mundo se había venido abajo.

Y ahora sonaba el teléfono.
Mientras se desperezaba, pensaba en si esa podría ser la llamada que la sacara de la más absoluta de las miserias, del pozo oscuro en el que había caído y del que nadie podría rescatarla hasta quién sabe cuándo.
Pero empecemos por el principio. Rebeca conoció a Alberto cuando todavía era demasiado jóven para todo. Él era músico y ella, una joven ingenua de 18 añitos cayó rendida a sus pies. Al principio, todo eran piropos y regalos para ella, pero poco a poco eso cambió. Tuvieron 3 hijos de los que se encargó de criar ella solita, nunca trabajó fuera de casa y siempre fué demasiado cobarde como para separarse de él, incluso cuando comenzó a a decirle zorra, o a darle bofetadas "para que aprendiera".

Sin embargo, hacía un par de meses, después de celebrar la boda de su hija la pequeña y después de la muerte de su madre, a la que estuvo cuidando en su agonía durante mucho tiempo decidió que era la hora de decir "hasta aquí hemos llegado" y comenzó a prepararlo todo.

A pesar de tener casi 60 años encontró un trabajo ayudada por el instituto de la mujer, y entre eso, y lo que había guardado durante estos años para que su marido no se lo gastara en alcohol y putas, podría vivir con dignidad. Buscó un abogado y presentó una demanda de separación. Alberto, enfadado y sorprendido le dió la última paliza antes de que le arrestara la policía, y ella comenzó a vivir sóla y feliz.

Pero ayer..., ayer todas sus esperanzas de vivir lo que le quedara de vida en libertad, se fueron al garete. Alberto salió de la cárcel, cogió el coche, y no pudo esquivar a un borracho que se había metido en dirección contraria por la autopista. Resultado: un borracho muerto y un delincuete (Alberto), herido grave. El equipo médico del Hospital del Sol, no pudo hacer nada. Alberto viviría el resto de sus días como un vegetal, y con el cerebro funcionando como el de un niño de 18 meses.

¿Qué podía hacer ella? No podía dejarlo tirado. Sus padres no vivían ya y solo la tenía a ella. No podía meterlo en una residencia, era demasiado caro, ni dejarlo al cuidado sus hijos, que eran jóvenes y tenían niños pequeños o intención de tenerlos, eso hubiera sido muy injusto para ellos.

Así que había decidido sacrificar su nuevo trabajo y su recién estrenada libertad, para cuidar a Alberto mientras esperaba que se muriera, y rezaba para que lo hiciera antes que ella, porque su vida a partir de ahora consistiría en dar comidas, cambiar pañanes y poco más.

Y ahora, sonaba el teléfono.
¿Y si era esa la llamada que le iba a salvar?
Rebeca fué a contestar. Al otro lado del auricular, alguién hizo una pregunta. Rebeca, con los ojos llenos de lágrimas respondió: lo siento..., se ha equivocado.

jueves, 26 de julio de 2007

Los Secretos - Pero a tu lado

Llevo unos días que no doy pie con bola, escribo 10 líneas y paro, así que tengo el blog lleno de borradores que no publico. Pero me parece mal tener tanto tiempo lo mismo, así que como la inspiración no llega he decidido poner otra canción. Esta me encanta, me pone los pelos de punta y hoy me he sorprendido canturreándola por el pasillo..., todavía no sé muy bien por qué. ¡¡¡Que la disfrutéis!!!

jueves, 19 de julio de 2007

Atunes en el paraiso

Me encanta esta canción. De vez en cuando se me aparece, hoy lo ha hecho gracias a mi hijo, que ha puesto un video casero en el que aparace.

domingo, 15 de julio de 2007

La Patera


35 subsaharianos han llegado esta madrugada a la isla de Fuerteventura tras ser avistados a tres millas de la costa. Salvamento marítimo les ha llevado al puerto de Gran Tarajal.


Noticias como esta las tenemos todos los días, ya ni les prestamos atención. ¿Cómo tiene que ser la desesperación de esta gente? ¿Qué es lo que les hace ahorrar unas cantidades de dinero para ellos estratosféricas para meterse en estas barcas? ¿Qué podemos hacer?


Hoy he recordado una canción, de Ella Baila Sola, La Patera, y no he podido evitar volver a escucharla. Sólo hay que darle al play, cerrar los ojos, y ponerse en su piel, aunque sólo sea durante el tiempo que dura una canción.


sábado, 14 de julio de 2007

Adiós nubarrón.


Llevo unos días conviviendo con la maldita nube negra por aquí. La señorita está muy cómoda, me acompaña a trabajar, duerme conmigo, come gratis y cuando hace calor le pongo el aire acondicionado. Le he dicho por activa y por pasiva, que se vaya a un hotel, o a casa de otro, que yo bastante tengo con marido, dos niños y perro, pero está tan cómoda la tía que no quiere irse. Así que he decidido pasar a la acción, impulsada por dos pequeñas buenas noticias y una mañana de trabajo no del todo mala (al menos no tan mala como las anteriores). Mi plan de acción es cambiar la música del blog y poner una sonrisa bien grande. A ver si se cansa y se va, aunque sea a casa de la vecina, que sabe que la mía es la suya y puede volver cuando quiera.

miércoles, 11 de julio de 2007

Un grito


He llegado al límite, no puedo esperar más.

Es hora de coger el toro por los cuernos y decidir quién seré a partir de ahora.

Podría ser una joven madre sana.

Podría ser una vieja prematura y amargada.

El caso es que, no me apetece, no tengo fuerzas ni siquiera para pensar en ello.

Resulta muy cómodo sumergirme en mi océano de bollería y comida rápida.

Pero quiero intentarlo, aunque no sé muy bien cómo.

Una vez leí, que cuando queremos hablar con Dios, miramos instintivamente hacia arriba.

A mí, me queda muy poca fé, sin embargo miro hacia arriba y le pido al universo que me ayude.

No me contesta.

Espero que me haya oído.

lunes, 9 de julio de 2007

La sabiduría les persigue..., pero ellos son más rápidos

...y yo que no soy más,
listo ni tonto que cualquiera...
J. Sabina - El blues de lo que pasa en mi escalera

Andaba yo el otro día hablando por el messenger con las Martas (lalitaa y mi hermanísima), y al mismo tiempo, veía el nuevo reality de Tele 5 "Nadie es perfecto" (todavía tengo la capacidad de hacer dos cosas a la vez). Pues bien, el programita de marras, consiste en enfrentar a un grupo de 6 guapos contra otro de 6 listos, poco original, veremos si es exitoso. Los guapos, guapísimos, cuerpazos de escándalo, modelos casi todos, tabletas de chocolate para ellos, y pechos tulgentes para ellas. Los listos, con dos carreras, chicos de 24 años que aparentan tener 40, indumentaria hippie o desaliñada, y algo de pedantería. Los primeros, hacía siglos que no tocaban un libro, los segundos, no se habían montado en su vida en una bicicleta estática.
Dejando el hecho de que me parece una barbaridad que los listos no hubieran hecho nunca jamás ejercicio, hoy me centraré en los guapos.
Para empezar, pasemos por alto que una chica de 25 años responda 25 a la pregunta de cúanto son 5 por 8 (a lo mejor responde siempre eso, porque es su edad), porque es algo que no merece la pena analizar y vamos a las fotos.
La prueba consistía en enseñarles fotos de personajes famosos, y ellos tenían que adivinarlos. Yo pensé que serían difíciles, pero comenzaron con Antonio Gala. Ninguno de los 6 supo decir el nombre del autor de "La pasión turca" entre otros, pero la cosa no quedó ahí, porque pasaron a los políticos. Puedo perdonar que no conocieran a Rodrigo Rato, pero una que ha sido un poco guerrista toda la vida (hasta el punto de perdonarle por lo de su hermanito), no les pasa que no conocieran a Alfonso Guerra, ni a Adolfo Suárez, Dios, aunque sólo fuera porque lo sacan todos los días en el "tomate". Mi moral subió un poco cuando dijeron que Arturo Pérez Reverte era un periodista pero no me acuerdo del nombre, y volvió a caer en picado cuando recordaron que era un periodista del corazón (y mira que hemos tenido Alatriste hasta en la sopa). Que confundieran al Dalai Lama con el Papa, fué lo de menos, y que dijeran que Margaret Thatcher era diseñadora de moda fué la risa del día.
Al final, convenimos Raul y yo, que aquello era un montaje y que no podía ser verdad que entre 6 supieran menos que mi hijo de 3 años, así que me fuí a la cama, con un buen sabor de boca.
La felicidad duró poco, al día siguiente, una conocida de 40 años, me preguntó dónde estaba Bilbao, cuando le dije que en el País Vasco, me volvió a preguntar que dónde estaba el País Vasco, así que le respondí, por el Norte, pero por si acaso, apostillé, p'allá arriba.

martes, 3 de julio de 2007

Soy una petarda faltona (que dice que es amiga de Panchito Varona)

Si hay un defecto que tengo, es que me pierde la boca, bueno, realmente tengo muchos más, aunque procuro no reconocerlos en público, que una tiene que publicitarse como buena persona, a falta de altura y belleza romana, pero a lo que íbamos, que me pierde la boca, que la tengo tan grande como un buzón y que la uso mucho para sacar defectos en lugar de para ensalzar virtudes.

Y ¿a qué viene esto? Pues viene a que el sábado 30 de Junio, con una resaca de pajarracos de morirse, llegué la primerita a la plaza del Pilar. Después de hablar con Sonia y decirme que estaban esperando un taxi, decidí que tenía por lo menos 45 minutos de espera (no sé qué narices ocurre con las licencias de taxi en Zaragoza, pero es imposible coger uno), así que me senté en una terracita de la plaza a tomar un café con hielo.

1'70 euros más tarde, estaba disfrutando de una buena mañana, con una vista completa de la plaza, cuando bajando por la calle Alfonso, aparecieron las primeras entrevistas del blog, les hice una señal con la mano, y se acercaron hasta mí. Besos, buenos días, ¿queréis un café?, no que ya hemos desayunado, ni nos sentamos aquí de pie, uno a cada lado, mientras desayuno como una reinona.

Bueno, entonces, ahora es cuando tengo que decir, lo mucho que me gustó el concierto de anoche (que es verdad), lo bien que tocan ellos (que es verdad), lo bonito que estaba todo (que es verdad), y la de veces que se me pusieron los pelos de punta (que es verdad) y por qué no, también la típica frase que dice que han escrito la banda sonora de mi vida (que joder, también es verdad).

Pues no, a la bocabuzón de Anita, cómo no le gusta recibir halagos (bueno si le gusta pero le hace pasar mucha vergüenza), piensa que a los demás les pasa lo mismo, y cuando tiene la oportunidad de hablar un ratito con Pancho Varona y Jose Romero, sólo se le ocurre decir, por Dios, vosotros que habláis con los jefes, que alguien le diga a Serrat que se acerque el micro para cantar. O que se aprenda las canciones de Joaquín (sólo se equivocó dos veces). O que el escenario es un pelín operación triunfo. O que cuando Serrat saluda a todos los músicos vestidos de negro es como si pasara duelo. O que no me gustan las presentaciones que hacen en "el muerto vivo", que prefiero lo de siempre, lo de "llega hasta dónde yo no llego Antonio García de Diego". O que alguna cosa parece metida con calzador (mentira cochina).

Ayyy! Anita!!!, cuánto te queda por aprender....

Foto: Marta Pérez (lalitaa)